La carta que Najmanides (Ramban, Rabi Moshe Ben Najman) enviara a su hijo desde Acre, Israel a Cataluña, España, no quedó a través de los siglos como una simple carta de padre a hijo, dándole buenos consejos de conducta y del cumplimiento de su deber espiritual como judío, sino que a lo largo de generaciones trascendió hasta llegar a ser un documento de enseñanza y guía del pueblo judío. Es fuente maravillosa del saber, del pensar y del sentir, que tonifica y refresca. Es como una luz que ilumina nuestro sendero del bien.