Inspirado en un aforismo de nuestros Sabios que afirma que a través del Santuario (Mishkán) la Presencia Divina moraba en el corazón de cada judío, este libro explora y analiza las relaciones simbólicas que existían entre cada elemento del Santuario y las distintas partes del cuerpo humano. Un texto indispensable para quien pretende profundizar en el significado del Santuario y el Templo y su relevancia para el pueblo judío.