Baba Sali fue un rabino y tzadik marroquí del siglo XX, conocido por su santidad y milagros. Su legado espiritual se centra en la devoción a Dios, la práctica de la caridad y la conexión con la comunidad judía. Es recordado por sus enseñanzas de compasión, humildad y fe inquebrantable, que continúan inspirando a seguidores en todo el mundo.
Encender velas frente a las fotos de los sabios en el judaísmo es una práctica arraigada que tiene múltiples significados. Es una expresión de respeto y honor hacia la sabiduría y santidad de los tzadikim, y sirve para mantener viva su memoria y legado en la comunidad. También se considera una forma de invocar su protección y guía espiritual, creyendo en su continua influencia como fuente de inspiración y bendición. Esta tradición fortalece el vínculo espiritual con los sabios y la tradición judía, conectando a las generaciones actuales con los valores y principios transmitidos a lo largo del tiempo.